Te has preguntado cómo están constituidos los sindicatos en las organizaciones y con ello su funcionamiento dentro de ellas. Acá te contamos un poco de qué se trata y cómo podemos manejarlo desde el entorno corporativo para tener una relación sana y que no limite la operatividad de las compañías, ni el desempeño de los empleados.
¿Qué es un sindicato?
Un sindicato es un grupo interno dentro de cualquier compañía o institución, conformado por empleados de todas las áreas sin obligación alguna. Tiene como objetivo principal el bienestar de sus miembros o sindicalizados y de la misma forma, generar mediante la unidad, la suficiente fuerza y capacidad de negociación como para establecer una dinámica de diálogo social entre el empleador y los trabajadores.
A lo largo de la historia se ha escuchado de la conformación de sindicatos como mecanismo de conciliación y negociación de los aspectos laborales de la clase obrera. Sin embargo, al escuchar la palabra sindicato, es inevitable pensar en situaciones de estrés en las compañías como: pancartas en las fachadas, renuncias o despidos masivos de empleados, e incluso en revuelos mediáticos. Esto no es más que una referencia errónea que se tiene dadas las noticias que se ven en los medios y que desde la gestión humana empresarial se pueden corregir, tanto para los empleados como para el entorno.
Según la Organización Internacional del Trabajo – OIT, además de ser un derecho, la libertad sindical y de asociación permite a los trabajadores y empleadores unirse para proteger mejor no sólo sus propios intereses económicos, sino también sus libertades civiles como el derecho a la vida, a la seguridad, a la integridad, y a la libertad personal y colectiva. Este principio, elemento integral de la democracia, es fundamental para hacer realidad todos los demás principios y derechos fundamentales en el trabajo.
Basados en esta primicia, podemos entender que todo empleado puede ser parte de estas asociaciones, siempre y cuando respete las normativas y sus acciones no afecten el desarrollo de la organización. Debido a que el objetivo principal de un sindicato es lograr que las condiciones laborales sean justos para todos, el sindicato y la empresa hacen una negociación que se establece en un contrato colectivo en donde se implementan las condiciones laborales dentro de la empresa.
Influencia del sindicato en las organizaciones
Para lograr un buen clima laboral y que el sindicato sea un aliado para el bienestar empresarial, la empresa debe cumplir con lo establecido en el contrato pactado y este no puede cancelarse, a menos que se llegue a un acuerdo. Se pueden realizar modificaciones y siempre recurrir al dialogo entre empleados y empleadores para evitar la huelga o una alteración en el desarrollo laboral.
Siempre será importante cuidar el capital principal de una empresa, sus empleados. Pero es importante reconocer hasta qué punto como empleador se pueden exigir o implementar normativas y hasta qué punto también, el empleado puede recurrir a requerimientos o posiciones en desacuerdo a las mismas.
Ventajas y desventajas del sindicato en una organización
Los sindicatos tienen como principal ventaja la horizontalidad y mejor comunicación con los trabajadores desde los cargos superiores, esto es fundamental porque directamente permite una mayor productividad para la empresa y empleados contentos con su trabajo.
El hecho de que existan momentos de encuentro para la escucha activa de sugerencias y soluciones para el rendimiento. Esta escucha sumada a un acuerdo legal que acredita todo, genera que los trabajadores se sientan conformes con sus condiciones y tengan satisfacción en la empresa y cumplir con sus actividades.
Para finalizar, también es importante dejar claro que la reputación de los sindicatos en una empresa no es del todo positiva, como cualquier otro grupo de trabajo, no hacer las cosas bien genera más problemas en vez de soluciones. Existen algunos sindicatos que no hacen su trabajo correctamente por lo que también te diremos cuáles pueden ser las desventajas del sindicato.
Con ello, hay algunas desventajas que también se pueden considerar como ocasiones en las que los empleados exigen a la empresa más de lo justo: Al momento de negociar con el sindicato puede que se quieran pasar de listos y exijan más de lo necesario lo que puede provocar un descontento por parte de ambos. Por otro lado, al no tener respuesta inmediata en muchas ocasiones se crean huelgas, que están demarcadas como derecho dentro de la OIT, sin embargo estas a su vez también generan algo de ruido y es perjudicial para la reputación de la marca.
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